El 7 de octubre pasado, Efrat Katz, que según se informa había sido retenida prisionera por Hamás durante la operación Inundación de Al-Aqsa, fue asesinada, no por sus captores, sino por un ataque de un helicóptero israelí. Esta acción, tomada para evitar su captura a cualquier costo, se ejecutó según la Directiva Hannibal, un controvertido protocolo militar israelí. El comandante de la Fuerza Aérea israelí confirmó que el ataque se realizó según órdenes militares, lo que expuso una estrategia operativa encubierta que se pretendía mantener en secreto.
Una investigación reciente de Haaretz ha revelado que, a pesar de las afirmaciones de su revocación en 2016, la Directiva Hannibal se implementó el 7 de octubre del año pasado.
El informe del periódico, publicado el domingo y basado en relatos de soldados sionistas y altos funcionarios militares, reveló que durante la operación Inundación de Al-Aqsa llevada a cabo por Hamás en octubre pasado, el ejército israelí emitió una orden que establecía que "ni un solo vehículo puede regresar a Gaza".
La Directiva Hannibal es única en los anales de las estrategias militares globales. Esta política, que tiene sus raíces en la doctrina de defensa de Ben-Gurion, surge de las vulnerabilidades estratégicas del régimen sionista, que caracterizan a un régimen que está constantemente al borde del abismo.
Desde su autoproclamación como un supuesto Estado en 1948 bajo el liderazgo de David Ben-Gurion, el régimen se ha encontrado en una trayectoria de colisión con los países de la región debido a su ocupación de tierras palestinas.
Sumada a la limitada profundidad estratégica de los territorios ocupados y los desafíos demográficos que plantea una población compuesta en gran parte por inmigrantes, la situación geopolítica del régimen sionista obligó a sus fundadores a adoptar medidas drásticas.
La doctrina Ben-Gurion se basa en tres principios básicos: disuasión, alerta temprana y capacidad ofensiva decisiva. Estos principios sentaron las bases para protocolos militares extremos como la Directiva Aníbal. Esta política fue desarrollada para ocultar las vulnerabilidades del régimen sionista y proyectar una imagen de fuerza e inexpugnabilidad.
Sin embargo, en octubre de 2023, la inundación de Al Aqsa sacudió gravemente la doctrina Ben-Gurion hasta sus cimientos, lo que provocó la implementación de la Directiva Aníbal, que también se utilizó durante la Guerra de Gaza de 2014. Esta decisión tenía como objetivo evitar la captura de soldados y colonos sionistas, pero fracasó. Los combatientes de la resistencia de Hamás lograron capturar a 250 sionistas.
La implementación de la Directiva Aníbal ha afectado no solo a las vidas sionistas, sino también a la confianza pública y la reputación internacional del régimen.
Las recientes revelaciones sobre la aplicación de la directiva han presentado nuevos desafíos para el régimen. Estas revelaciones podrían erosionar aún más la confianza pública e intensificar las protestas que ya están pidiendo negociaciones para liberar a los cautivos sionistas.
Estas protestas subrayan una creciente división dentro de la comunidad de colonos israelíes, una división que se profundiza con cada decisión militar controvertida. Los colonos perciben cada vez más que sus líderes no tienen en cuenta su seguridad, lo que contradice las garantías oficiales de seguridad.
Desde que se implementó la directiva hace 275 días, han surgido fracturas más profundas dentro del régimen sionista, lo que pone de relieve la escalada de desafíos. A medida que el régimen continúa con estas prácticas, aumentan las presiones internas y externas, lo que plantea interrogantes sobre la moralidad de tales medidas militares.
David Ben-Gurion, uno de los padres fundadores del régimen sionista, destacó la importancia primordial de la seguridad frente a las amenazas existenciales, y su doctrina ha sido la piedra angular de la estrategia militar del régimen durante décadas.
Inspirado por la doctrina Ben-Gurion, el Primer Ministro Netanyahu ha tratado de reforzar la seguridad del régimen sionista durante décadas y cultivar una imagen de sí mismo como "Sr. Seguridad".
Sin embargo, la Operación Inundación de Al-Aqsa marcó un revés significativo para la doctrina Ben-Gurion y los fundamentos de la postura de seguridad de Israel.
Con la ayuda de los EE.UU., el régimen sionista se embarcó en una brutal campaña destinada a desmantelar a Hamás y rescatar a los cautivos israelíes, pero resultó en la trágica pérdida de más de 38.000 vidas y desencadenó protestas mundiales, incluidas importantes manifestaciones en los Estados Unidos, el principal aliado de Israel.
La protesta internacional se extendió a las universidades estadounidenses, lo que dio lugar a una represión extraordinaria con más de 3.100 estudiantes detenidos, lo que refleja una creciente conciencia y oposición al genocidio estadounidense-israelí en Gaza.
Además, las recientes revelaciones sobre la Directiva Aníbal han puesto al descubierto las vulnerabilidades que el régimen sionista ha intentado ocultar durante mucho tiempo.
Al implementar medidas brutales como esta directiva, el régimen ha tratado de proyectar una imagen de invulnerabilidad, demostrando su determinación de que sus colonos y soldados están más allá de toda captura.
Sin embargo, ahora la atención se centra firmemente en las tácticas inhumanas del régimen, y sus intentos de ocultar sus debilidades fundamentales están desmoronándose.
A pesar de los importantes esfuerzos del régimen sionista y de su partidario, Estados Unidos, los fracasos del genocidio en Gaza, destinados a rehabilitar su empañada reputación, han quedado inequívocamente claros.
Como destacó el Líder de la Revolución Islámica, el Imán Jamenei, durante su discurso del 9 de enero de 2024 al pueblo de la provincia de Qom, los signos de derrota y fracaso del régimen sionista son evidentes.
"Dijeron que destruiríamos a Hamás y a la Resistencia y desplazaríamos a la población de Gaza. Pero no lo hicieron, y hoy la Resistencia sigue siendo fuerte, vigorosa y completamente preparada, mientras que el régimen sionista está exhausto, humillado y lleno de arrepentimiento. La verdadera naturaleza del régimen sionista ha quedado expuesta", señaló.
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