La fundación del primer núcleo de ISIS se remonta a 2004 después de la caída del régimen de Saddam. La intervención militar de los países occidentales a Irak dejó un vacío de poder en este país, preparando el terreno para la aparición de los grupos salafistas y takfiristas. Daesh es en realidad, una rama de estos grupos.
En el 2006, el grupo de al-Tawhid wal-Yihad fue fundado por Abu Mus’ab Zarqawi en Irak, un grupo que representaba al-Qaeda en Irak. Después de su asesinato, Abu Omar al-Bagdadi fue sustituido en su lugar y luego de él, Ibrahim ‘Awad al-Samarra’i conocido como Abu Bakr al-Bagdadi alcanzó el liderazgo de al-Qaeda en Irak. Se dice que él era antes un granjero, que fue entrenado por las fuerzas estadounidenses con el fin de ocupar esta posición. Al-Bagdadi decidió tomar el poder de al-Yawlani en Siria (Sham) para conquistar los dos territorios, a saber, Irak y Siria. Finalmente en el 2013, se anunció la restauración de un califato bajo el título del Estado Islámico de Irak y el Levante. Dado que según la Escuela Sunita, el califa debe ser un descendiente de la tribu de Quraish, al-Bagdadi se fabricó para sí mismo un árbol genealógico que se remonta a Ya’far al-Kazzab, un hombre de la familia del Imam Hadi (P) que fue desviado después del martirio de su padre.
Es de hacer notar; que cada una de las ramas de al-Qaeda ha tenido como propósito establecer un Estado Islámico en su territorio. Al-Bagdadi era el primer Gobernante de al-Qaeda que se anunció a sí mismo como el califa de los musulmanes, a pesar de que los otros líderes de al-Qaeda no estaban de acuerdo con él. Bagdadi tuvo los recursos petroleros de Deir ez-Zo, Riqqah y el norte de Siria bajo su control, y por lo tanto; se sentía independiente de la Organización principal de al-Qaeda, así que cuando Ayman al-Zawahiri lo criticó por reclamar el Califato, le declaró que su califato era la voluntad de Dios y que él seguía el mandato de Dios, en vez de obedecer la orden de Ayman al-Zawahiri.
Las consecuencias del surgimiento de Daesh
Dañar la imagen del Islam en el Mundo.
Prender el fuego de la guerra interna entre los musulmanes.
Desviar el camino de los movimientos revolucionarios en los países árabes.
Afectar a los países que apoyaban la Resistencia Islámica contra el régimen Sionista.
Difundir el sectarismo entre los musulmanes.
La guerra subsidiaria en la región, donde las potencias occidentales utilizan a terceros como sustitutos, en vez de enfrentarse directamente.[32]
La pérdida de los altos propósitos de la Comunidad Islámica.
La falta de seguridad en el Mundo Islámico.
La difusión de la Islamofobia en el mundo.
La destrucción de los Santuarios de los musulmanes.
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