La amistad es un excelente vínculo humano que se establece entre los individuos sobre la base del afecto, la cooperación, la sinceridad, el consejo, el respeto y la compatibilidad en las opiniones e ideas. Se trata de un sentimiento innato en las personas que lo ambicionan en busca de la armonía y convivencia entre sí.
La amistad es un proceso de interacción que se manifiesta en los modales y ética del amigo y se demuestra en el momento de adversidad y de las circunstancias difíciles. Por eso, Imam Yawad (P) nos advirtió sobre la necesidad de ser cuidadosos y pacientes a la hora de elegir el amigo y nos dijo lo siguiente: “Abstente de acompañar a los pecadores. Ellos son como una espada aguda. Tienen una bella apariencia; mientras que sus efectos son muy nocivos”.
Esta narración hace referencia a lo importante de alejarse del pecado, de los pecadores y de los opresores. El amigo o te puede acompañar por el camino del bien o te puede involucrar en lo malo y repudiable.
En otra palabra nadie puede negar la influencia de los amigos en la vida del ser humano. La amistad con personas malas y pecadoras puede conducir a la persona hacia la miseria; ya que la compañía con malos amigos, presentarse en lugares obscenos y ambientes pecaminosos afecta el estado de espiritualidad del ser humano. Se puede afirmar que el primer paso para acercarse a Dios es alejarse de los pecadores.
De hecho, la compañía de malos amigos contamina el alma del ser humano, al igual que una fresca brisa obtiene mal olor al pasar por un montón de basura. Esta narración puede referirse también a la importancia de la emigración; ya que las personas que viven en lugares o países que están llenos de pecados y corrupción, poco a poco se ven afectadas por el ambiente. Si el pecado domina sobre un lugar, aquellos que viven o trabajan allí estarán en peligro de verse afectados por sus compañeros. Por lo tanto, tales personas tienen que tener mucho cuidado en seleccionar a sus amigos.
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