En el último día de la vida del Imam Husain (P) y sus compañoros, Abbas, el hermano del Imam, se adelantó y dijo: “Querido hermano, el ejército enemigo viene hacia usted. El Imam ordenó a su hermano que fuera a ver lo que quería, y Abbas fue al enemigo y les preguntó qué había sucedido. Dijeron: “El Emir emitió un decreto que jurasen lealtad a él, o prepárense para la guerra”. El honorable Abbas también transmitió el mensaje al Imam Husain.
Imam (P) dijo: “Esta noche tomen una tregua para que recemos y supliquemos a Dios. Dios sabe que, a mí, me gusta mucho rezar y recitar el Corán por Él”.
El honorable Abbas (P) se dirigió hacia el ejército, comunicó el mensaje y parado frente a ellos empezó a exhortar, y después de hablar con ellos, logró tomar la noche como tregua.
El Imam Sayyad dice que en la noche del nueve de Muharram, mi padre reunió a sus compañeros para hablar por ellos, y fui a ver lo que decían. Fui a escuchar y mi padre les decía a sus compañeros: “Les permito marcharse de aquí en la oscuridad de la noche. Aprovechen la oscuridad de la noche y salgan de aquí, son libres para hacerlo junto con sus cercanos y compañeros". Ya no tienen pacto de obediencia conmigo, déjenme solo con esa gente. Estas personas me quieren a mí y si me detienen, no tendrán nada que ver con los demás.
En ese momento, algunos compañeros dijeron:
"¿Por qué lo debemos hacer? ¿Para proteger nuestra vida después de tu muerte? Pido a Dios que yo nunca vea aquel día”.
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