La oración en el Islam (Salat) es el principio práctico más importante, de modo que nadie puede estar exento de ella (La única excepción se refiere a las mujeres durante la menstruación). Soldados involucrados en una guerra, pacientes en hospitales, pasajeros en aviones o barcos, todos deben realizar las oraciones (Salat) incluso con algunas modificaciones basadas en sus circunstancias. Por supuesto, el Islam ha puesto mucho énfasis en la oración por algunas razones. Estas razones se revisan en este artículo como Filosofía de la oración en el Islam.
La filosofía de la oración en el Islam, un principio práctico del Islam
Según el Profeta Muhammad (la paz y las bendiciones sean con él y su familia): “La oración es el pilar de la religión, y su parábola es la del pilar de una tienda: cuando el pilar permanece en posición vertical, las estacas y cuerdas permanecen rectas y erguidas, pero cuando el pilar se dobla o se rompe ni las clavijas ni las cuerdas quedan en posición vertical ”[2]. Esta declaración destaca la importancia de la oración en el Islam. La inclinación hacia la bondad y evitar los males son los resultados de la práctica de las oraciones. "De hecho, la oración prohíbe la inmoralidad y la maldad ... Y Allah sabe lo que haces" (29:45). En otras palabras, la oración en el Islam es la base, y cualquier otro acto de un musulmán está influenciado por eso.
El Corán parlante
Dos roles principales de la oración en el Islam
Hay dos roles principales para la oración en el Islam: el promotor espiritual y el recordatorio permanente. El Profeta Muhammad (P) dijo: “La oración de una persona es (en realidad) una luz en su corazón, por lo que quien quiera, puede iluminar su corazón (a través de las oraciones)” [3].
Haciendo las oraciones todos los días, uno recuerda repetidamente a Dios en intervalos, renueva su promesa de servidumbre a Dios, se purifica y trata de alejar todos los pensamientos y acciones malignos [1]. Según el Imam Ali (P), el Mal estará celoso de la persona que defienda la oración porque ve la Misericordia de Dios rodeando a esa persona [4]. Por lo tanto, la oración como recordatorio repetido se detiene de los pecados y desarrolla la infalibilidad.
La oración, una llamada repetida
Algunos discuten que ¿por qué se deben realizar las oraciones cinco veces al día? ¿Es aparecer todos los días y recordarle a Dios que estamos allí y somos sus siervos? ¡Por supuesto que no! Como se dijo anteriormente, es para recordarnos a Dios sin cesar y recordar que somos sus siervos. Si uno olvida por un instante que Él está presente en todas partes y nos observa (“Ni le sobreviene la somnolencia ni el sueño” (2: 255)), fácilmente podría correr el riesgo de cometer malas acciones. Estas malas acciones pueden ser perjudiciales para uno mismo o incluso para los demás. Entonces, la oración tiene consecuencias tanto individuales como sociales.
Una verdadera oración tiene algunos requisitos previos; limpieza a través de la ablución (Wudu), estar de pie en la presencia de Dios con todo el corazón y el cuerpo, no usar ropa usurpada o no realizar la oración en un lugar usurpado, etc. Según el Imam Ali (P), la oración no será aceptada si la ropa de una persona y donde hace la oración no son lícitos (Halal) [5]. Además, el Imam Ali (P) dijo que quien realice la oración y perciba lo que está haciendo y diciendo, sus pecados serán perdonados una vez que finalice la oración [6].
Todo esto demuestra que el intento de realizar una verdadera oración da como resultado varios logros como el respeto a los derechos de los demás, la pureza de la apariencia y del interior de uno, etc. Habiendo cumplido todas estas condiciones, uno podría cumplir con los requisitos divinos y alcanzar la felicidad prometids mediante la realización de una "oración completa".
No hay sustituto de la oración en el Islam
Algunas personas suponen que no necesitan realizar las oraciones. Dicen que servir a los seres humanos que son las criaturas de Dios es igual a adorar a Dios. Afirman que no es necesario hacer las oraciones como un acto de adoración. En cambio, intentan hacer el bien a otros humanos. Para responder, la oración es un apoyo a la moral y los principios sociales. Como se dijo anteriormente, nos recuerda el comportamiento ético, las responsabilidades sociales que uno tiene hacia los demás y evita hacer mal a los demás [1]. Por lo tanto, la oración nunca puede ser reemplazada por ninguna otra buena acción.
Referencias:
1. Shaikh al-Hur al-Aamili, "Wasail al-Shia", pág. 214.
2. A. al-Hindi, "Kanz al-Ummal", vol. 7, T. 18973.
3. Allama Majlisi, “Bihar al-Anwar”, vol. 82, pág. 207.
4. H. Harrani, "Tuhaf al-Uqul", pág. 174.
5. "Makarim al-Akhlaq", pág. 300.
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