AhlulBait

Fátima (P), fue la hija del Profeta del Islam (Bpd) y Jadiyah al-Kubra (P).

Fatimah creció con el Islam, vivió con el Corán, respiró el aire del Mensaje de la Profecía, su vida no estaba desvinculada de la de su padre. Inclusive luego de su casamiento su casa era vecina a la suya. El Profeta (BP) frecuentaba su casa más que cualquier otro sitio. Cada mañana antes de dirigirse a la mezquita, visitaba a Fatimah.

Fátima, a quien el Profeta del Islam llamaba “la Señora de las mujeres del Universo” y “como parte de sí mismo”, quien fuera el consuelo de su padre a través de la sura Al-Kauzar, quien será la primera persona que entrará en el Paraíso; quien por medio de su súplica descendió una mesa servida desde los cielos, la mujer más querida para el Enviado de Dios; As-Siddiqah Al-Kubra, la Gran Veraz; la que fue llamada por el mismo Profeta (BP) “la madre de su padre” por la manera en que se esmeraba en cuidarle; la intercesora en el Día de la Resurrección, cuya grandeza fue comprendida por los Cielos antes de la creación de la humanidad.

El difunto exegeta Bahraní¸ en su obra relata de Abu Al Hasan Keidarí que la carta que le fue entregada al Imam 'Alí (P) al final de este sermón contenía diez preguntas:  ¿Cuál fue la criatura que salió del vientre de otra criatura pero no fue su descendiente? El Imam (P) respondió: "El Profeta Jonás (P) que salió del vientre de una ballena". ¿Qué es aquello que en poca cantidad fue permitido pero mucho era prohibido? Respondió: "El arroyo de Saúl. (Dios os probará con un arroyo. Quien beba de él no será de los míos. Quien no lo pruebe, será de los míos, a menos que beba una sola vez del hueco de la mano. Y bebieron de él, salvo unos pocos)".[1]  ¿Cuál es el acto de devoción que si alguien lo realiza será castigado y si no lo realiza

Fátima (P) tuvo muchos pretendientes y muchos hombres de entre los sabios y compañeros del Profeta (PBD) que querían casarse con ella, entre ellos ‘Umar, Abu

Dijo Muslim en su Sahih que cuando fue revelada esta aleya el profeta (ByP), invocó a Ali, Fatima, Al-Hasan y Al-Husain (que la paz sea con ellos) y dijo: ¡O