A quien le gusta que los opresores continúen (viviendo) le gusta la desobediencia a Dios (continuando) en esta tierra

Safwan Jammal bin Mahram Kufi fue un compañero muy piadoso del Imam Jafar as-Sadiq (a.s.) y el Imam Musa al-Kadhim (a.s.). Solía ​​ganarse la vida alquilando camellos.
Poseía una gran cantidad de camellos.
Él dice que un día el Imam Musa al-Kadhim (a.s.) le dijo: "Safwan, cada acción tuya es meritoria excepto una".
"Puedo ser sacrificado por ti, ¿qué acción es esa?" Él dijo: "Usted alquila sus camellos a Harun al-Rashid (l.a.)"
Él dijo: "No doy mis camellos para la caza o los juegos, pero él los toma cuando va al Hajj y yo mismo no le sirvo, ordeno a mis sirvientes que los acompañen en el viaje".
El Imam (a.s.) preguntó: "¿Te pagan por adelantado o después de su regreso?"
"Después de que regresen", respondió, "¿No llevas la esperanza de que regresen sanos y salvos de su viaje para que recibas tu pago?"
"Sí."
El Imam (a.s.) dijo: "Aquel que desea que permanezcan con vida es como ellos y aquel que está conectado con ellos irá al Infierno". (Wasail ul-Shia)
Safwan dice que cuando escuchó esto vendió todos sus camellos. Cuando Harun se enteró de esto, lo llamó y le preguntó por qué. Él dijo: "Me he vuelto viejo y débil y no puedo cuidar de los camellos, incluso mis esclavos no son capaces de mantenerlos adecuadamente".
Har?n dijo: "¡No es así! Sé quién te ha persuadido para que hagas esto. Lo has hecho en la dirección de Musa Ibn Jafar (a.s.)".
"¿Qué tengo que ver yo con Musa Ibn Jafar?" dijo Safwan, pero Har?n no estaba satisfecho y dijo que si no hubiera tenido buenas relaciones con Safwan, lo habría hecho matar.
El Imam Jafar as-Sadiq (a.s.) dice: "A quien le gusta que los opresores continúen (viviendo) le gusta la desobediencia a Allah (continuando) en esta tierra". (Wasail ul-Shia)
Mientras explicaba el verso coránico, "... y no te inclines por los que son injustos, para que el fuego no te toque". (el corán 11:113)
El Imam (a.s.) dice: "Si una persona se acerca a un gobernante y desea que viva, aunque solo sea por el tiempo que le tome, mete la mano dentro de su bolsa de dinero y le da una cierta cantidad".
Desear la vida de un opresor aunque sea por un momento es lo mismo que estar inclinado hacia él.