La naturaleza del más allá parte I

La naturaleza del más allá

La muerte y la naturaleza de la otra vida siempre han sido misteriosas para los seres humanos. Todo el mundo está dispuesto a descubrirlo por sí mismo o a tener fe en lo que se ha dicho y descubierto al respecto. Los musulmanes buscan la respuesta en el Corán, el libro sagrado en el que creen. En los pensamientos coránicos, la muerte no es más que la transferencia del alma humana del universo natural al mundo espiritual, volviendo al que lo creó todo, es decir, Dios; “En verdad pertenecemos a Dios, y a Él en verdad volvemos” (2: 156).

Según el Sagrado Corán, la muerte no es inexistencia o destrucción, sino un umbral para la siguiente etapa de la vida y la existencia. Sin embargo, es digno de mención que lo que forma la naturaleza exacta de la humanidad no es la composición física y material que se desintegra y se destruye después de la muerte; de hecho, nuestro yo real está formado por nuestra alma que es apresada y liberada del cautiverio del cuerpo y luego regresa a su origen, la presencia Divina, Dios.

Por lo tanto, la muerte en el punto de vista islámico ocurre cuando el alma o yo inmortal de un ser humano corta su apego y relación con el cuerpo y, en consecuencia, el cuerpo perece mientras el alma continúa su vida sin él.

“Di: Serás llevado por el ángel de la muerte, que ha sido encargado contigo. Entonces volverás a tu Señor ”(32:11).

Vida después de la muerte

Ahora bien, uno podría preguntarse qué nos pasa después de la muerte; ¿Vamos a comenzar nuestras vidas en el más allá de inmediato, o experimentaremos una etapa temporal diferente de la vida que durará hasta el Día del Juicio?

Los musulmanes obtienen la información sobre este tema, a través de las revelaciones recibidas por el último Profeta, Muhammad (la paz sea con él), en los versos del Corán. Según lo que le ha sido revelado a nuestro profeta, la otra vida no comienza inmediatamente después de nuestra muerte. Los seres humanos entrarán en un mundo intermedio llamado "Barzakh" en el que sentirían, verían y escucharían todo de manera diferente; habría cosas que disfrutarían y sufrirían, basándose en sus hechos en esta vida terrenal. En resumen, el hombre atravesará dos etapas distintas de la vida después de la muerte; uno temporal que vendrá inmediatamente después de la muerte, y uno que durará para siempre y nunca terminará.